Esta mañana me he levantado con este artículo y hoy no me apetecía callarme. El escrito hace referencia al personal
informático de la Administración, aunque imagino que es extrapolable a
cualquier empresa, sobre todo a aquellas donde las TICs no son la base del
negocio y la informática no es más que esa oscura alquimia que ayuda a
alcanzar unos objetivos mediante retorcidas artes... Al principio se
muestra comprensivo, suave y solidario: pero mediado el texto nos mete
la puntilla, eso sí, sin perder cierto tono condescendiente y
conciliador...